Domínguez dijo que lo más urgente es destrabar la crisis en torno a la aplicación del impuesto a la renta personal, una legislación cuyo cumplimiento había sido prorrogado hasta el 31 de agosto próximo.
Varios gremios, entre ellos el de los contadores, habían solicitado la prórroga señalando al mismo tiempo cuestionamientos a la ley en cuanto a las limitaciones a la deducibilidad de las inversiones y la imposibilidad de compensar las pérdidas fiscales.
En ese sentido, Domínguez se comprometió a promover una gran “campaña de reconciliación con el sector empresarial y el gremio de contadores sobre esta administración, al tiempo de indicar la necesidad incrementar la base tributaria, atrayendo a los sectores informales y realizar el cobro de los impuestos “de manera correcta”.
“A quienes ya se encuentran declarando hacer que declaren correctamente y con más facilidad por sobre toda las cosas, que es lo que más queremos”, sostuvo.
El nuevo viceministro se comprometió también a continuar la lucha contra la informalidad, el contrabando y la evasión mediante el trabajo en conjunto con la Dirección Nacional de Aduanas (DNA).