Manifestó que la situación se volvió realmente preocupante independientemente si lo analizamos desde el punto de vista de la medicina privada o pública. Si hablamos de tiempos pasados los partos por cesáreas solo se realizaban como un extremo recurso
“Podemos decir que si la causa que generó la primera cesárea está ausente en el segundo nacimiento si puede tener un parto normal”, respondió.
“Se debe prever si está indicada o no la cesárea basándose en el control prenatal aunque existen situaciones que la misma naturaleza indica si será un parto normal o no. Si vamos a la puntuación que a mayores números de hijos hay mayor velocidad en la dilatación es correcto”, alegó el médico.
El momento donde el feto se encuentra ya en la parte vaginal es de menor oxigenación del mismo, entonces se necesita actuar de manera rápida si el mismo músculo ya está haciendo resistencia a la salida del feto entonces la solución podría ser una episiotomía, un corte en la zona dos centímetros ya que esos momentos son cruciales para que el bebé nazca sano. La episiotomía bajo ninguna circunstancia se debe hacer de forma rutinaria, explicó.
Concluyó diciendo que la obstetricia en general es una caja de sorpresas, es impredecible la velocidad con la que se puede desencadenar las cosas, desde que estudia medicina ya se viene estudiando esta cuestión y que aún no se está encontrando la luz al final del túnel.