“Él quería escribir sus memorias, lo hacía con ayuda de su colaboradora, Gladys Fischer y a fines del año pasado llegaron al final del libro, pero lastimosamente también llegó su final antes del lanzamiento del libro, lo pudo ver en borrador, pero no estuvo para lanzarlo como él quería”, contó.
“Él vino aquí diciendo que quería vivir entre los pobres, entonces vino al Bañado Sur. Ahí hace Parlamento Joven, Mil Solidarios. Le devolvió la confianza a mucha gente, le consiguió trabajo. Devolvió autoestima. Mucha gente logró salir de la marginalidad gracias a él”, recordó.
“Fue fundamental en el marzo paraguayo, en la investigación del caso Curuguaty. Siempre escribiendo, siempre hablando en su programa de radio de Fe y Alegría. Siempre fue una guía para toda la sociedad a través de sus espacios. Fue una vida tan plena y merecía ser recordado”, expresó.
Boccia relató que “él deja su nota agradeciendo en su agenda y ahí decía ‘Si mañana amanece y yo no amanezco. Fue exiliado y dejó semillas muy importantes en varios países. Siempre trabajó mucho. Lo extraordinario es que era tan activo, tenía tanta energía. Él ya se sentía paraguayo y decidió vivir la última parte de su vida aquí”.