Las redes de tráfico de especies en peligro están integradas por ciudadanos chinos quienes, en vuelos comerciales, contrabandean colmillos, pieles, y otras partes del cuerpo de jaguares. Una vez que dejan América Latina, los venden en China a precios exorbitantes como artículos de élite.
Surinam es el país con más jaguares en todo el mundo. Su población humana apenas supera los 500 mil habitantes, y la extensión de selvas ocupa 93 % de todo el territorio nacional. Previo a la caza furtiva, se prestaba para ser un paraíso para estos felinos, así como para otras especies que se ven afectadas por la minería, la tala excesiva y la compraventa de animales exóticos.
Además de la red de comercio ilegal, los expertos que han analizado la problemática señalan que los peligros a los que se enfrentan los jaguares son los siguientes:
- Asesinato por retaliación, cuando se mata al jaguar por atacar al ganado o a las mascotas.
- Destrucción y fragmentación del hábitat del felino para la minería.
- Caza furtiva para el tráfico, actividad que se ha convertido en la principal amenaza para el felino.
Para mitigar los efectos de estas actividades, el Gobierno de Surinam está capacitando a guardabosques para frenar el acceso de cazadores furtivos a la selva.
Fuente: National Geographic