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Pablo Aguilar marcó el gol de un cabezazo en los minutos finales del encuentro ante el Ciclón para lograr un empate y llevarse a casa un punto. “Es un empate con sabor agridulce”, contó.
“Teníamos el partido prácticamente en nuestras manos y se nos escapó, son cosas que en el fútbol pueden pasar. Aún no podemos asimilar que fue lo qué falló. De repente dieron la vuelta el partido”, comentó.
¿Dónde estuvo la falla del equipo?
“Las desconcentraciones nos jugaron en contra. Era un partido tranquilo para nosotros y el cansancio pudo haber jugado un papel importante para ellos y los cambios que hicieron entraron a complicarnos un poco, así fue que llegó el primer gol de ellos. Después llegó el empate”, dijo.
“Sabemos lo que nos jugamos y lo que representamos, le dolió a todo el plantel lo que pasó”, acotó.
Dijo que el empate ante el Azulgrana ya queda atrás y que se enfocarán en el partido del sábado. “No hay margen de lamento”, agregó.