Posteriormente, al percatares de esta situación, la barra de los Gallos Blancos, la cual se encontraba en detrás de la portería de Washington Aguerre, corrió por los pasillos del Corregidora hasta encontrarse con los rojiblancos. Pese a que dentro del recinto había elementos de seguridad, su actuar fue ineficiente y, en algunos casos, ausente ante la situación, puesto que los aficionados de Querétaro lograron su cometido: encarar a sus homólogos del Atlas.
Al momento de su encuentro, la barra del Querétaro llegó directamente a agredir a los fanáticos del Atlas, no sólo con sus puños, sino también con sillas, fierros, butacas, cinturones y todo tipo de objetos que se les cruzó en el camino.
No obstante, la situación comenzó a perder el control luego de que una gran cantidad de aficionados de los Gallos Blancos invadieron el terreno de juego con el fin de posicionarse justo en frente de la barra rojinegra para provocar su enojo. Esto no pudo ser cesado por los elementos de la seguridad privada del recinto, debido a que los seguidores del Querétaro lograron hacerse de tubos, presuntamente se habrían tratado de los banderines de esquina, con los que los agredieron.
Ante ello, cientos de familias y asistentes ajenos a las barras también resultaron heridas al tratar de huir de la violencia. Corrían con destino a la salida, pero la pelea no sólo se presentó en las gradas y en el campo, pues, de acuerdo con varios materiales audiovisuales compartidos por usuarios de redes sociales, la trifulca fue llevada a diversos de puntos del Corregidora.
En un más de un video se puede apreciar como padres de familia buscaban escapar del estadio con sus hijos en mano, mientras que otros optaron por ocultarse entre las gradas al mismo tiempo que trataban de consolar a los pequeños, ya que su esperanza de ver a su equipo triunfar se quebró con imágenes de hombres desnudos llenos de sangre.
More Entradas for Show: Entre Paréntesis