Incluso otros países de la zona como Georgia han suspendido también sus ligas y Ucrania celebrará los partidos a puerta cerrada, pero la Unión de Fútbol Rusa ha optado, por el momento, por decisiones menos drásticas.
El Zenit San Petersburgo, líder de la liga, acogerá mañana al Ural sin mayores restricciones de aforo, aunque será el último, ya que el Ayuntamiento ha prohibido a partir del lunes actos públicos que reúnan a más de mil personas en la antigua capital zarista.
Los partidos que se disputen en Moscú hasta abril, entre los que figura un Zenit-CSKA y un Dinamo-CSKA, tampoco podrán acoger más de 5.000 personas con el fin de prevenir la propagación del coronavirus.
Así lo ordenó el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, edicto consistorial que afectará también a otros deportes como el baloncesto, el hockey o el voleibol.
En la misma línea, mientras la Euroliga y la NBA se han suspendido hasta nuevo aviso, la liga rusa de baloncesto rusa continuará, algo que no ha gustado ni a la directiva del CSKA Moscú ni a jugadores como Mike James, que se quejaron públicamente en las redes sociales.EFE