En un comunicado, la agencia de coordinación policial explicó que el operativo llevó a la localización y rescate de 15 víctimas menores de edad, que en algunos casos estaban siendo “explotadas por sus propias familias”.
La red, que provocó “daños físicos y mentales” a los niños que forzaba a mendigar entre múltiples áreas, controlaba al menos 80 zonas de mendicidad en París y sus alrededores, con ingresos semanales de unos 3.000 euros, que lograba incluso recurriendo a “la violencia armada y guerras sangrientas” con grupos enemigos.
La organización había acumulado cinco millones de euros, agregó Europol.
La operación se saldó con la detención en las regiones francesas de París y Lyon de trece sospechosos, incluidos los supuestos capos de la red, activa “desde hace varios años” en el tráfico de migrantes y la trata de seres humanos en territorio europeo.
La Policía local belga y la Policía Nacional francesa registraron siete casas diferentes, donde confiscaron documentos falsificados, incluidos documentos de identidad, pasaportes, certificados de nacimiento y de matrimonio falsificados, dispositivos móviles, joyas de oro y pruebas de transferencias de dinero.
Las fuerzas policiales, coordinadas por Europol, investigaron desde abril de 2018 a esta organización que operaba en Bélgica y Francia, tras detectar que, entre otras cosas, facilitaba la entrada ilegal a Europa de migrantes sirios, a los que proporcionó documentos falsificados para solicitar de manera fraudulenta el asilo y beneficios sociales en sus países de residencia. EFE