“Tenemos la presunción que se compra la nafta de menor calidad del otro lado y que después se adultera con otro producto, puede ser con aguarrás. Porque las naftas en origen no tienen color, pero acá se establecieron los colores. Uno escucha que dicen que compran nafta súper, pero es solo el colorante señores”, afirmó.
Sostuvo que es un riesgo cargar a los vehículos un producto que genere problemas. “¿Vale la pena ir al taller de restauraciones a gastar G 4 o 5 millones para ahorrar unos cuantos?”, cuestionó.