La acusación impulsada por la ex directora de Kolping, Briggite Kreller de García, implicaba un supuesto lavado de dinero y mala utilización de los recursos de parte de los abogados de la Fundación ya citada.
Asimismo Cacavelos manifestó que Kreller de García tuvo un juicio oral por lesión de confianza y dijo que la publicación no es necesariamente cierta y esto causó repercusiones a nivel internacional.
Manifestó que esta Fundación debe recibir fondos y esta tiene que ser “transparente”, por esto el abogado Guillermo dejó su “interés personal” y afirmó que “dimensionó” y se le “movió el piso” fue la situación de que esto afecte gravemente a su cliente.