“Solicité a la Fiscalía General del Estado la apertura de una causa penal en Paraguay a los efectos de hacer los seguimientos investigativos en el contexto penal, porque analicé las informaciones publicadas por la prensa internacional y replicadas en la prensa local y entendí que podrían darse circunstancias penalmente relevantes, para investigar si hubo algún tipo de sabotaje del sistema informático para acceder a los correos de Marcelo”, afirmó.
“También a las comunicaciones que yo mantenía en mi condición de autoridad central de la cooperación penal internacional con un fiscal del Crimen Organizado y también la relevancia de la información que fue ventilada en todos los medios, estamos hablando de información de carácter confidencial que no solo atañe al sistema de justicia de Paraguay, sino también de Brasil”, aseveró.
Mencionó que se contactó con sus colegas de Brasil, quienes expresaron su preocupación ante lo ocurrido por lo que consideró oportuno la apertura de la causa penal para delimitar responsabilidades de las filtraciones.
La Justicia del Brasil había solicitado información al fiscal Pecci y Diego Arzamendia sobre el caso de Sergio de Arruda Quintiliano Neto, alias Minotauro.